El valor de la procesión
La peregrinación de la Virgen de Lourdes es la manifestación más grande de fe que hay aquí en Vargas. Hay otra que es la bendición del mar, más ésta, son las que reúnen el mayor número de feligreses. Es una tradición bellísima, la gente va rezando, cantando, otros lo agarran como ejercicio, pero sin duda, es una manifestación de fe. Al final se celebra la santa misa aquí en el atrio de la iglesia de San Sebastián de Maiquetía a las 6 de la tarde .
La familia Aranguren siempre fueron habitantes de aquí (de Campo Alegre) y siempre ha sido muy católica. Desde chiquitos nosotros nacimos con esa fe. Es una tradición que toditos hasta el más pequeño quiere ir con la Virgen. La procesión para mi es sagrada. Yo lo hago porque siento una fe por dentro, un amor hacia la virgen. Quisiera que esto se diera a conocer más. Ahorita con la situación del país deberíamos unirnos más, pedir mucho por Venezuela, independientemente de las religiones que tengan. Dios es uno solo y la Virgen es una sola .
Lo confieso. La primera vez que fui a la procesión fue por insistencia de mi papá, porque él tiene mucho tiempo haciéndola, y ¡guao! recuerdo que llegué súper cansado a Maiquetía. Todos los años es el mismo sentimiento cuando uno llega acá abajo, pero siempre voy. Es una caminata muy bonita, por eso ya tengo años haciéndola. Me llevo a mi grupo juvenil de la parroquia, a mis primos, mis amigos, a mucha gente, porque quiero que ellos también vivan la experiencia. Una experiencia de fe, una experiencia de compartir. Aquí en La Guaira yo digo que la gente se queja mucho porque aunque tenemos el Parque Nacional El Ávila, no tenemos un camino como Sabas Nieves, o caminos para llegarle más fácilmente a los picos. Por ello, creo que también vale la pena vivir esta experiencia, porque así se conocen los caminos que hay desde La Guaira hacia el Parque Nacional .
Tengo tiempo haciendo la peregrinación, alrededor de 40 años. Me llama mucho la atención la enorme manifestación de fe mariana que existe en el pueblo de Vargas, pero también en Caracas y en muchas otras partes. He visto en las procesiones muchísima gente muy mayor haciendo su caminata, que pareciera que no van a llegar, pero si llegan. Hay una fe increíble. También personas descalzas, que hacen una promesa a la virgen y por cumplimiento van así. Ha sido bastante beneficioso. Incluso cada año se puede apreciar mayor cantidad de jóvenes. La gran mayoría de las personas que va por primera vez a la procesión siempre dicen ´No vengo más´, pero estoy seguro que el 11 de febrero de todos los años, nos vemos siempre. Se ha hecho como una familiaridad .