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Estribo Duarte 

La loma de Estribo Duarte, que suele utilizarse para visitar algunos sitios de interés como El Paraíso o Piedra del Indio (ver ruta aquí), lleva su nombre de su antiguo propietario, Juan Pablo Duarte, quien luego se trasladaría a Santo Domingo y libertaría esta isla del dominio español. 

En el pasado, El Ávila estaba colmado de haciendas. En este caso, la hacienda Duarte, pasaría luego en manos de Domingo Álvarez, quien ha sido descrito como un hombre serio, laborioso y honrado, que vivió allí modestamente. 

Cabe destacar que en la hacienda Duarte trabajó como peón Jesús María Negrín, quien se convertiría en un famoso personaje de la Caracas de finales del siglo XIX e inicios del XX. Debido a que provenía de una familia de bajos recursos, trabajó desde pequeño como ayudante en las faenas agrícolas de la hacienda de Domingo, pero más tarde su vida tomaría un cambio de rumbo, tras conocer a un profesor alemán con quien recorrería varias partes de Venezuela y del mundo, empapándose de sus conocimientos botánicos y sobre la cura de una enfermedad, la parasitosis. 

Luego de morir su profesor, Negrín regresaría a Caracas, donde se volvería famoso como “herborista parapsicólogo”, salvando gran cantidad de vidas. Cabe destacar que a principio no cobraba, pero luego vio en esta una oportunidad de trabajo y servicio al prójimo.

Muchos le hicieron la guerra, entre ellos médicos y autoridades, quienes dudaban de sus conocimientos, pero luego de rigorosos exámenes que se le realizaron, finalmente pudo ejercer su profesión, en su dispensario de Sabana Grande. Recibía personas no solo de Caracas, sino de otros pueblos y haciendas. Incluso hubo épocas en que se dice que atendía alrededor de cien personas por día. 

En su honor, una calle de Sabana Grande (que aún hoy existe) se llamó Negrín. En el pasado, hasta hubo una línea de buses que iban desde El Silencio hasta Negrín. Algunos ven a este personaje como un ente mitológico, otros como un brujo o empírico, pero lo que sí es cierto es que, con sus preparaciones, curó a mucha gente que creyó en él. Murió en Maiquetía en 1933. 

Si deseas continuar leyendo sobre la vida de Negrín, aquí te compartimos un reportaje de la Revista Élite realizado en 1934, a un año de su muerte. 

Fuentes consultadas: 

Manara, B. (1993) El Ávila, biografía de una montaña. Caracas: Monte Ávila Editores; Fundación Cultural Chacao.

http://www.sabanagrandeonline.com/site/index.php?option=com_content&task=view&id=174&Itemid=2

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