Piedra del indio
¿Cómo llegar?
Una de las rutas más utilizadas y cercanas hacia la Piedra del Indio (1.600 m.s.n.m), se encuentra en el mirador del Distribuidor Sebucán, de la avenida Boyacá o Cota Mil.
Para llegar a ella, puedes tomar el metro hasta la estación Los Dos Caminos y frente a esta estación tomar una camioneta que te deja cerca del Centro Comercial Sebucán. En este caso, nos quedamos en la transversal 16 de la avenida Los Chorros, desde donde subimos una pendiente, pasamos un gimnasio al aire libre y tomamos la Cota Mil.
Esta ruta es muchos menos conocida que Sabas Nieves o La Julia, pero conduce a un mirador natural del valle de Caracas, una piedra mágica que permite recargar las energías. En el camino podrás disfrutar de la frescura del terreno, unas hermosas vistas, flora y regalos únicos de la naturaleza.
PGP Cachimbo
La ruta se inicia por una subida empinada de cemento de corta distancia que nos lleva en unos 5 minutos hacia el PGP Cachimbo (1.210 m.s.n.m), donde debes anotarte con el guardaparques, quien lleva un control de las rutas de los visitantes.
A partir de aquí el camino es de tierra, un tanto irregular, con pendientes, rocas y vegetación muy tupida, por lo que en algunos puntos resulta muy incómodo cruzar y se debe tener cuidado al transitar pues algunas hojas tienen filos que te pueden dejar desagradables cicatrices. Te recomendamos llevar camisa y pantalón largo.
Sin embargo, lo compensan las bonitas vistas de la ciudad, lo sombreado y fresco del camino y los deliciosas mangos que si prestas atención podrás disfrutar.
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Más adelante, seguirás teniendo hermosas vistas de la ciudad; podrás deleitarte con la figura del pico Oriental, unas caídas de la quebrada Tocomé o Los Chorros y el sendero de Estribo Duarte. Además, si tienes suerte podrás fotografiar algunos aniamalitos. Por esta parte abundan también los helechos.
Un poco más arriba, luego de alrededor de 35 minutos, te encontrarás con una intersección de caminos. La del oeste (izquierda) se dirige hacia la quebrada Tenerias, Los Palos Grandes, Altamira, Chacaíto, entre otros. Identificarás el cruce por ser un espacio más amplio bajo árboles de eucalipto.
Para llegar a Piedra El Indio debes seguir el sendero a mano derecha (en subida).
Este es un corto trecho que inicia con una pequeña subida para llegar a un plano donde al este, podrás divisar la Piedra del Indio; mientras que del lado derecho se encuentra una explanada, donde se ubica el Helipuerto estribo de Cachimbo, lugar despejado para el aterrizaje de helicópteros en ayuda de enfermos, accidentes, combates de incendios o cualquier otra emergencia.
Esta parte del trayecto, desde la intersección, se hace más abierto y se deja atrás la vegetación enmarañada. La vista se vuelve increíble.
Finalmente, luego de pasar una ladera escarpada se llega por el lado izquierdo a la Piedra del Indio, que también recibe el nombre de “piedra del mirador” o “la laja” (1600 m.s.n.m). Se trata de un gran peñón semiplano desde donde se contempla un amplio paisaje de las urbanizaciones Los Chorros y Sebucán, y a lo lejos la cadena de montañas del interior.
Desde ella, se tiene una panorámica excepcional de la ciudad. Además, es posible observar en la piedra, si se pone cuidado, algunos grabados que se cree que fueron obra de los indígenas que alguna vez habitaron las laderas del parque. Se dice que, posiblemente, este fuera el punto donde se reunían los jefes mariches.
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Desde aquí se tiene una sensación indescriptible de paz. De hecho, desde el pasado siglo, la piedra fue uno de los miradores preferidos por los caraqueños para contemplar la grandeza a sus pies. Dice una tradición que todo caminante al llegar a la Piedra del Indio debe quitarse los zapatos y pedir tres deseos.
Justo debajo de la piedra existe una pequeña cueva que hace las veces de refugio.
Siguiente parada: Piedra del Indio
Desde la Piedra del Indio parten dos caminos
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Uno asciende por la fila hasta la cumbre del Pico Oriental. Este camino conocido como subida de Cachimbo es muy empinado, con vegetación de sabana y sin árboles que ofrezcan sombra, por lo que en días soleados el calor es bastante fuerte. Se recomienda llevar abundante líquido, ya que por ese punto no hay tomas de agua. No obstante, se disfruta de fabulosas vistas tanto del este de la ciudad como del Pico Naiguatá y de la Fila Maestra.
Este sendero que sube hacia el Oriental es un tanto difícil de conseguir, pues comienza con una roca como de 3 metros con dificultad para escalarla. Es quizá el punto del trayecto realmente difícil. Antes de llegar al Oriental, pasarás por “Cabeza de elefante (2.050 msnm), una especie de roca que es como un mirador con una linda vista; se llama así porque parece la cabeza de este animal. Más arriba encontrarás la Cruz de los Palmeros y más allá la altura máxima del Oriental, señalada por otra cruz.
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El otro camino (hacia el este), plano y en bajada, nos acerca a la montaña frondosa que rodea la quebrada Tocomé, conocida popularmente por los caraqueños como Los Chorros, con abundante agua, cuyas cascadas se oyen tronar. De hecho, Tocomé es una de las quebradas que tiene mayor volumen de agua y el lugar es excelente para acampar y descansar.
Es un camino muy bello, lleno de plantas exuberantes con hermosas flores y árboles altos que ofrecen abundante sombra. El agua cristalina corre por muchas vertientes formando fascinantes caídas de agua y pozos donde puedes refrescarte, descansar y compartir con la naturaleza. Eso sí, como en todas las quebradas del parque el agua es bastante fría.
No por casualidad este lugar ha sido bautizado como “El Paraíso”, destacándose tres pozos que hacen pensar en tres piscinas en seguidilla.
